martes, 29 de noviembre de 2011

DEVOCIONAL DÍA 18 DE NOVIEMBRE



FIESTA DE LOS TABERNÁCULOS


“Pero a los quince días del mes séptimo, cuando hayáis recogido el fruto de la tierra, haréis fiesta al Señor por siete días; el primer día será de reposo, y el octavo día será también día de reposo. 40Y tomaréis el primer día ramas con fruto de árbol hermoso, ramas de palmeras, ramas de árboles frondosos, y sauces de los arroyos, y os regocijaréis delante del Señor vuestro Dios por siete días. 42En tabernáculos habitaréis siete días; todo natural de Israel habitará en tabernáculos”.

Levítico 23:39,40,42


Esta celebración es el final de todas las Fiestas. Es una auténtica fiesta. La cosecha ya está guardada. La obra de Dios se ha completado. Esto sucederá cuando Jesús venga de nuevo. Se tomarán ramas de árboles y nos gozaremos delante del rostro del Señor. Se hizo esto cuando Jesús cabalgó sobre Jerusalén. Se sentía como que el año del jubileo empezaba ya. Ahora estaba el Mesías aquí, pero no sabían que era el siervo sufriente del Señor quien había venido.

Pero viene pronto el Rey de reyes. Entonces cantaremos como nunca antes lo hicimos: ”¡Bendito el que viene en el Nombre del Señor!”. Esta celebración tiene dos partes. Una parte es la construcción de las cabañas para recordar la vida y el tránsito por el desierto y la protección de Dios en los tiempos difíciles. Pero también uno mira adelante a la meta que es el Mesías y Su reino que ha de venir y quitar todo lo provisional, todo lo penoso y todo lo miserable. Su descanso está aún vigente para que entremos en el. Jesús es nuestro reposo, nuestra bendición, nuestra vida y nuestro sentido de vivir.

El propósito no es que nosotros busquemos solamente Sus bendiciones o solamente trabajemos para Su reino. Debemos buscarle y estar con Él. Toda fuente de provisión la tenemos en Él, y en Él tenemos todo lo que necesitamos. Durante esta ceremonia se derramaba agua. Jesús dijo en esa ceremonia: “Si alguno tiene sed venga a mí y beba”. Él es quien satisface y da vida de tal manera como nadie puede hacerlo.


Ulf Ekman


ORACIÓN:
Gracias Señor porque Tú eres mi fiesta de Tabernáculos. En Ti hay vida, gozo, descanso, satisfacción y propósito para mi vida. Por medio de Ti viene el fruto y la cosecha y lo preparas para la gran cosecha final que vendrá sobre todo el mundo. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.