viernes, 30 de marzo de 2012

DEVOCIONAL DÍA 29 DE MARZO



OBSTÁCULOS A LA RESPUESTA DE LA ORACIÓN


“Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas”.

Marcos 11:25


Si hay algo que pueda impedir la respuesta a la oración es la falta de perdón. Algo que es muy común en nosotros es que cuando hablamos con Dios tenemos una norma y otra cuando hablamos entre nosotros. Con la lengua, dice Santiago en su epístola cp. 3:9, “bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, que están hechos a la semejanza de Dios”. Nosotros medimos con diferentes varas de medir. Esto dificulta la respuesta a la oración. Jesús lo deja bastante claro: “Si tenéis algo contra alguno, perdonad”. No es de extrañar que no recibamos respuesta a la oración.

La fe actúa mediante el amor, por lo que la fe deja de ser operativa en la carencia de amor y la falta de perdón. Es posible que algunas personas te hayan ofendido de alguna manera. Y por ello crees que debes mantener tu derecho a estar en su contra. Pero es justamente esto lo que tú y yo no debemos hacer. Por mucho que podamos enumerar lo que otros nos han hecho, y en este sentido nuestra memoria podría ser muy aguda y precisa, aún así, no tenemos derecho a mantenernos en su contra.

Cuando vienes al altar, déjalo todo en él si quieres tener respuesta a tu oración. El perdón no es absolutamente un acto emocional, así que no esperes tampoco que se te presenten dulces sensaciones antes de perdonar. El perdón es un acto de la voluntad. Lo trágico es que a veces las personas no quieren perdonar. Desean tener algo para criticar, o denunciar, y de forma pedante, rebuscar errores o debilidades en otros. Desean hacer minuciosas listas que prefieren divulgar sobre supuestos errores de otros. Una persona así está sentada en la silla equivocada, en la silla del juez, y toda la alegría, toda la unción y todo el sentido de la vida desaparecen. Y la respuesta a la oración no llega. Procura no caer en ello.


Ulf Ekman


ORACIÓN: Señor, mira que mi corazón no albergue el rencor y la cólera irreconciliable contra los que me han ofendido. Yo también he ofendido a muchos. Gracias por Tú perdón. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

DEVOCIONAL DÍA 28 DE MARZO



LA FE SABE QUE LA RESPUESTA HA SIDO CONCEDIDA


Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá”.

Marcos 11:24


Cuando Jesús se refiere a cómo hemos de hablar al monte, continúa hablando respecto a la oración. Todo está relacionado: la fe del corazón que se aferra a la Palabra de Dios. La Palabra de Dios que nos ha sido revelada a nuestros ojos espirituales. Y el corazón está tan lleno que la boca no puede retenerlo. La orden en fe dada al monte y la oración en fe a Dios. Todo ello son las dos caras de una misma cosa. Dios hace milagros y maravillas cuando en fe actuamos según Su Palabra.

No hay límites en lo expuesto. Jesús dice: “todo lo que pidiereis”, quiere decir que podemos pedir cualquier cosa. La palabra “pedir” en griego es “aiteo” que se asemeja a “exigencia”. El temor de la mente programada religiosamente dice que a Dios nunca se le debe exigir. No, no egoístamente, censurando o arrogantemente, pero a Dios le agrada que como la mujer siro-fenicia, nos afirmemos en nuestros derechos de Pacto y nos aferremos a Sus promesas. A Dios le agrada cuando con libertad reclamamos lo que nos ha prometido y nos sostenemos perseverando en ello. Aquí Jesús dice que debemos creer que hemos recibido la respuesta a la oración cuando pedimos, no cuando lo vemos. Cuando pedimos conforme a las promesas de Dios y tomamos en fe lo que Dios ha prometido.

Dios se agrada cuando creemos en lo que Él dice. Cuando Jesús maldijo la higuera Él sabía que estaba maldita desde el mismo momento que la orden salió de Su boca, no cuando Pedro la vio. La raíz fue atacada por la Palabra de Dios y el efecto se vio un día después. Cuando tú oras, toma la respuesta inmediatamente, después el tiempo pasará pero tú sabes que la has tomado en fe y la respuesta está en camino. “Cree que lo recibirás y te vendrá”.

Ulf Ekman


ORACIÓN: Señor, perdóname por todas las veces que oro una y otra vez la misma oración lo que demuestra mi incredulidad desde el primer momento. Gracias porque has contestado a mi oración y está en camino. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

miércoles, 28 de marzo de 2012

DEVOCIONAL DÍA 27 DE MARZO



ECHA TU MONTE AL MAR


“Porque de cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el mar, y no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que diga le será hecho”.


Marcos 11:23


El “monte” se levanta como símbolo de problemas imposibles, obstáculos o dificultades. Cuando Jesús compara el monte con la higuera es justamente porque ésta no le dio nada para comer. Es como si la higuera dijera a Jesús:”de aquí no recibes nada, no quiero satisfacer tu necesidad”. Cuando Jesús la maldijo, al momento murió, pero el resultado no se hizo evidente hasta el día siguiente. Lo que murió fue la raíz del problema en el momento que él le habló.

Jesús dice que nosotros hagamos lo mismo con nuestro monte. Que no estemos solamente pensando en ello, ignorándolo o huyendo de él. No lo menciones, sino háblale al monte. Lo que Jesús dice es. Si nuestros corazones están llenos de incredulidad y recordamos que la fe viene de la Palabra de Dios, o sea, que si nuestro corazón está lleno de lo que Dios ha dicho, de lo que Dios nos ha dicho, y se lo decimos a las contrariedades reacias y recalcitrantes, entonces el monte se echa en el mar. Esto no es cierto solo para Jesús. Él dijo:”Cualquiera que dijere…”, es decir, se aplica a todos. Él dijo:”Cualquiera que dijere…” Quiere decir que también se debe expresar lo que tenemos en el corazón. Si creemos en lo que decimos será hecho como lo hemos dicho, esto es lo dice Jesús muy claramente. Jesús no miente. Él quiere decir lo que dice. Él demostró cuando secó la higuera el poder que tienen las palabras pronunciadas cuando son Palabra de Dios proclamadas con la fe del corazón. ¿Y cuándo acontece lo dicho? No cuando Pedro vio las hojas mustias, sino cuando las palabras se pronunciaron: lo que diga, le será hecho”, dice Jesús.

Nosotros solemos creer cuando vemos, por eso vemos tan poco. Jesús quiere que creamos y lo digamos antes de ver, así recibiremos lo que creemos y decimos.

Ulf Ekman


ORACIÓN: Gracias Señor porque Tú me enseñas hasta donde mis palabras pueden alcanzar cuando estoy en línea con Tú Palabra. Gracias porque cada “monte” puede echarse al mar. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

martes, 27 de marzo de 2012

DEVOCIONAL DÍA 26 DE MARZO



¡TENED LA FE DE DIOS!


“Respondiendo Jesús, les dijo: Tened fe en Dios”.


Marcos 11:22


Jesús maldijo una higuera y los discípulos oyeron lo que le dijo. Al siguiente día Pedro vio que la higuera se había secado desde la raíz y se lo indicó a Jesús, seguramente con cierto orgullo en su voz. Entonces Jesús comenzó a enseñarles sobre la fe. Pedro habló por lo que vio. Pero la fe es la convicción de las cosas que no se ven. Jesús dice: ¡Tened fe en Dios!” (Marcos 11:22). En griego puede traducirse también por: “¡Tened la fe de Dios!”.

Muchos tienen problema con la idea de si Dios tiene que tener fe, pero está claro que Él la tiene. Él tenía en su corazón una profunda convicción desde mucho antes de ver la Creación. Él vio en Su interior cómo sería todo mucho antes de que existiera. Él tuvo un sueño en Su interior de que tendría una familia con la que mantendría comunión. Él lo vio en Su corazón y creyó en ello. Él tenía fe de corazón. Por eso hablaba lo que creía y Sus palabras crearon realidades. Sus palabras se emitieron y la Creación surgió.

Tú y yo somos el resultado de la visión de Dios, de la fe de Dios. Esta fe proviene de Él. Tiene en sí misma Su cualidad. Tú eres eterno y permanente. La fe, la esperanza y el amor siempre permanecerán. La fe de Dios que llega a ti y a mí como un regalo del cielo no es lo mismo que la resolución de unos supuestos vacíos de este mundo o una garantía mental. Esta es la fe, la fe del corazón; la fe que vence al mundo.


Ulf Ekman


ORACIÓN: Gracias Señor porque tienes fe en Tú corazón. Creíste en mí más que yo creo en Ti. Cuando me salvaste pusiste una medida de fe en mi corazón. Ayúdame a desarrollarla. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

lunes, 26 de marzo de 2012

DEVOCIONAL DÍA 25 DE MARZO



¿QUÉ QUIERES?


“Respondiendo Jesús le dijo: ¿Qué quieres que te haga? Y el ciego le dijo: Maestro, que recobre la vista”

Marcos 10:51


Bartimeo había oído hablar de Jesús. Él sabía que se encontraba cerca. Nadie podría pararle. Gritaba de tal forma que la gente educada se asustaba y trataban de silenciarlo y tranquilizarlo. Pero ellos no estaban ciegos. El ciego era él. Ellos no estaban cansados de su situación. Lo estaba él. La opinión de ellos pesaba poco. El hambre de un milagro pesaba mucho. Y Jesús se paró. Había algo en el rostro de Bartimeo que Jesús captó. Esto llamó su atención y le llamó. Entonces se despojó de su manto. No era un manto viejo cualquiera, era el manto del cual vivía. El manto del mendigo, que como ciego le daba el derecho a mendigar. Pero ahora no iba a mendigar más porque dejaría de ser ciego. Lanzar el manto fue un acto de fe. Él sabía que lo sabía: Jesús le iba a sanar. Jesús no le preguntó a Bartimeo: ¿cuál es la voluntad de Dios?; sino ¿Qué quieres? En Juan 15:7 dice: “…pedid todo lo que queréis, y os será hecho”. Jesús pregunta qué quieres. A menudo la religión ha quitado esto y nosotros piadosamente respondemos: “solamente lo que Dios quiera”. Pero Dios quiere que tú digas lo que deseas. ¿Cuál es tu deleite? ¿Cuál es tu anhelo? ¿Cuál es tu deseo? ¿Qué quieres tú?

En Juan 15:7 Jesús dice:”Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis y os será hecho”. Un hombre que viene a Jesús y quiere seguirle no pide cosas baladíes. Ahí no reside el problema. El problema reside en que la religiosidad ha puesto su sello de culpabilidad en nuestras oraciones y nos ha quitado la libertad atando nuestras conciencias de tal forma que no nos atrevemos a orar libremente. ¡Sé libre! Jesús te pregunta: “¿Qué quieres tú?”

Ulf Ekman


ORACIÓN: Gracias Señor porque en Ti no existen limitaciones. Tú estás interesado en cada área de mi vida. Tú deseas saber lo que yo quiero. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

DEVOCIONAL DÍA 24 DE MARZO



AL QUE CREE TODO LE ES POSIBLE


“Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.24E inmediatamente el padre del muchacho clamó y dijo: Creo; ayuda mi incredulidad”.

Marcos 9:23-24


Los discípulos habían fracasado. No pudieron liberar al muchacho. Habían empleado mucho tiempo argumentando con los fariseos mientras Jesús estaba en el Monte de la transfiguración. Fueron discusiones innecesarias y además funcionan como ladrones de energía. El padre estaba tan desesperado que cuando Jesús vino declaró resignado “…si puedes hacer algo, ten misericordia de nosotros, y ayúdanos” (Marcos 9:22). Esto desafió a Jesús. ¿Si Él podía? Él, que vino del cielo, era la Palabra que se hizo carne y tomó su habitación entre nosotros. Él, que es Luz que alumbra en las tinieblas, y las tinieblas no pueden resistirla. Está claro que ¡Él puede!

Jesús podía haberle respondido: “¿Sabes tú quien soy yo? Soy el Mesías, el Hijo de Dios, el Salvador del mundo”, pero no le respondió así. En vez de eso dio un paso más allá. Ahora quería mostrarle lo que la fe puede conseguir. La fe en Dios no tiene límites. Para el creyente, no sólo para Jesús, hay también infinitas posibilidades.

Este padre creía y no creía. A menudo es así con todos nosotros. Nuestra fe no se ha desarrollado lo suficiente para afrontar grandes desafíos; eso no significa que debamos sentirnos condenados o señalados por ello. Al revés, Jesús toma la fe desde el punto donde está para aumentarla y fortalecerla. Aquí Jesús muestra que no hay límites en el crecimiento ni hasta donde la fe puede llegar. Jesús tomó al muchacho, lo liberó y fue sanado. En todas las debilidades humanas el poder de Dios viene en nuestra ayuda. La fe es para venir a Él y esperar todo de Él. Su poder lo toma y el milagro acontece.

Ulf Ekman


ORACIÓN: Señor, gracias porque no hay límites a donde la fe no pueda llegar. Las posibilidades son infinitas. Los ojos de la fe ven la posibilidad donde la mente natural ve lo imposible. Permite Señor que vea todas las posibilidades que existen. En el Nombre de Jesús ¡MAÉN!

sábado, 24 de marzo de 2012

DEVOCIONAL DÍA 23 DE MARZO



EL PAN DE LOS HIJOS


“Respondiendo el, dijo: No está bien tomar el pan de los hijos, y echarlo a los perrillos.27Y ella dijo: Sí, Señor; pero aún los perrillos comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos”.


Mateo 15:26-27


La mujer siro fenicia había oído hablar de Jesús y quería que Él liberara a su hija. Los discípulos estaban irritados con ella debido a que Jesús parecía no querer responderla. Y cuando Jesús finalmente le habló parecía que lo hacía con cierta reticencia. El pan es para los hijos, no para los perros. Los perros eran inmundos. Un perro puede ser bonito y adiestrado y a pesar de ello comportarse bestialmente grotesco. Así veían los judíos a la gente de su alrededor. Su sofisticado aspecto cultural externo difícilmente ocultaba su estilo de vida promiscua que les caracterizaba. Esto sucedía desde los palacios de Roma hasta las cabañas de las aldeas fenicias.

Pero la mujer no se dio por aludida, permaneció firme. El pan de los hijos representaba todo lo que para Israel contenía el Pacto, incluida la sanidad. Así que cuando la mujer demandó unas migajas esto tocó el corazón de Jesús. Él sabía que llegaría el día cuando sus discípulos darían pan a todas las naciones. Su tarea era primeramente darlo a la casa de Israel. Pero Jesús nunca pasó por alto el hambre de nadie, ni ninguna expectativa, o la fe de alguien. Por eso fue sanada la hija de esta mujer.

Ella reclamó el contenido del Pacto. Una sola migaja del mismo era suficiente para que esta mujer recibiera su milagro. Una sola migaja del Pan de Vida que contiene el Nuevo Pacto es más que suficiente para ti. ¡Reclámalo! Tú no eres alguien que está fuera y lo pides. Tú eres un hijo en la casa por medio de Jesucristo así que el pan te pertenece.


Ulf Ekman


ORACIÓN: Gracias Señor por todas las bendiciones que están en el Pacto. Gracias por el pan que satisface toda mi necesidad. Hazme igual de ávido que ésta mujer para recibir todo lo que Tú me has enviado. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

DEVOCIONAL DÍA 22 DE MARZO



EL PODER DE LA INCREDULIDAD


“Y no pudo hacer allí ningún milagro, salvo que sanó a unos pocos enfermos, poniendo sobre ellos las manos. 6Y estaba asombrado de la incredulidad de ellos…”.

Marcos 6:5-6


En la sinagoga de Nazaret solamente unos pocos con enfermedades sin importancia fueron sanados. La atmósfera estaba cargada de incredulidad, a tal grado que Jesús se asombró de ello. En Capernaún también se había asombrado, pero esa vez fue por la fe del centurión gentil. Aquí el asombro era debido a la incredulidad. La incredulidad puede dejar caer su pesada y oscura mano sobre algunas congregaciones, algunas ciudades o algunas denominaciones. Donde la incredulidad se mueve, toda la expectativa de Dios desaparece. Queda reducida a una formalidad, una doctrina o un ritual; pero el amor, la sinceridad, la comunión y expectativa en Dios está como desaparecida. No es de extrañar que Jesús después de Su resurrección reprochara a sus discípulos por su incredulidad. Él sabía lo que puede destruir la incredulidad, la duda y el escepticismo.

Hay muchos que elevan la duda a virtud y casi se jactan de su escepticismo. Jesús nunca lo hizo. Él jamás ensalzaba la incredulidad, la combatía. Todos somos afectados por la duda, también los discípulos, pero ellos no aceptaron la duda como estilo de vida. Lo que Jesús hizo siempre fue más y muy diferente de lo que ellos esperaban de Él. Jesús los desafió continuamente a que creyeran más, a que tuvieran más fe.

En Nazaret la incredulidad corría como una corriente de frio a través de toda la comunidad. Y Jesús no pudo hacer allí ningún milagro. No se dice que Él no quiso, se dice que no pudo. ¡Jesús, el Hijo de Dios, Dios venido en carne, se vio obstaculizado por la negatividad de la gente del pueblo! Hoy es lo mismo. Cuando los creyentes carnales son reacios a confiar en Dios es porque en sus corazones hay otros dioses en quien confían y Jesús no puede hacer lo que Él quiere. Por lo tanto debemos arrepentirnos, cambiar la atmósfera reinante, despertar la fe y aumentar el hambre de Dios. En ese entorno Jesús puede hacer cualquier cosa que desee.

Ulf Ekman


ORACIÓN: Dios mío, que estás en los cielos, crea una atmósfera de fe en cada lugar donde Tu palabra es anunciada para que puedas hacer todo lo que Tú deseas. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

jueves, 22 de marzo de 2012

DEVOCIONAL DÍA 21 DE MARZO



NINGÚN CASO ES IMPOSIBLE


“Mientras él aún hablaba, vinieron de casa del principal de la sinagoga, diciendo: Tu hija ha muerto; ¿para qué molestas más al Maestro? 36Pero Jesús, luego que oyó lo que se decía, dijo al principal de la sinagoga: No temas, cree solamente”.

Marcos 5:35-36


La hija de Jairo yacía moribunda, y antes de que Jesús llégara murió. La gente alrededor rápidamente estuvo dispuesta a emitir un consuelo falso y unas excusas piadosas. Jesús no hizo caso a sus palabras. Es increíble como las palabras pueden afectar a nuestras mentes. Las palabras pueden dar vida y muerte. Las palabras pueden dar esperanza o matar el ánimo. Jesús no permite que las palabras de los hombres le inmovilicen. Él se dirigía directamente hacia un milagro en una situación desesperada y de una vez por todas demostrar que no existe ninguna situación imposible.

La mente de Jairo oscilaba entre la esperanza y la desesperación. Jesús realmente iba a su encuentro, pero fue impedido por una mujer con flujo de sangre que fue sanada, y ahora parecía que había llegado tarde. El temor y la desesperación eran como jarros de agua fría que vertidos se diluían por su alma a causa de las palabras negativas de la gente. Pero al momento, Jesús se vuelve y mirándole a los ojos le dice: No temas, cree solamente” (Marcos 5:36). Sus palabras produjeron una ola fresca de esperanza en el interior de Jairo y su corazón se llenó de fe. De alguna manera ya no era algo imposible.

Jesús solo permitió que le acompañaran sus discípulos más cercanos a casa de la familia. Jesús quiso dejar fuera el escepticismo y la incredulidad. La burla y la negatividad nunca tienen acceso cuando Jesús hace milagros. Estas siempre muestran su cara externa y deben estar a distancia. El Espíritu Santo se siente mejor en una atmósfera de adoración, amor y expectativa. ¡Y la chica resucitó de los muertos! Para Jesús no hay nada imposible, él nunca llega tarde.

Ulf Ekman


ORACIÓN: Gracias Señor, porque Tú me hablas personalmente en las crisis de mi vida y me dices lo que necesito oír. Por Tu palabra echas fuera el temor de mi vida. Para Ti no existen casos imposibles. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

DEVOCIONAL DÍA 20 DE MARZO



LA MUJER QUE TOCÓ EL MANTO DE JESÚS


“Pero una mujer que desde hacía doce años padecía de flujo de sangre, 26y había sufrido mucho de muchos médicos, y gastado todo lo que tenía, y nada había aprovechado, antes le iba peor, 27cuando oyó hablar de Jesús, vino por detrás entre la multitud, y tocó su manto”.


Marcos 5:25-27


Esta mujer había oído hablar de Jesús y deseaba verle inmediatamente. ¿Por qué? Porque había oído que ÉL sanaba a los enfermos. Vino a Jesús a pesar de que ningún médico había podido ayudarla. La habían hecho una mujer resignada y amargada que apenas se atrevía a buscar ninguna otra posibilidad. Pero no había permitido que las circunstancias la vencieran y cuando oyó hablar de Jesús respondió directamente. Se vio obligada a meterse entre la multitud, seguramente a empujones y arrastrándose. Ella se propuso no permitir que ninguna persona obstaculizara su milagro. La opinión de la gente, su indiferencia o renuencia puede a veces levantase como una montaña para impedirte que toques a Jesús, pero no permitas que esto determine lo que Jesús quiere hacer por ti.

La mujer pensó que si solamente pudiera tocarle ella sería sana, y en ese momento logró tocar el borde de su manto y un torrente de sanidad brotó hacia su cuerpo. En el Antiguo Testamento el remate o dobladillo del manto sacerdotal lo tapaba un trenzado de hilos de oro, lo cual era un símbolo de las palabras del Pacto de Dios, así que cuando ella tocó el borde del manto tocó en fe las promesas de Dios.

Inmediatamente Jesús percibió que había salido poder de él. Cuando preguntó quién le había tocado los discípulos pensaron que era una pregunta tonta. Todos le empujaban y le tocaban. Pero solamente hubo una persona que le había tocado en fe. Solamente había una persona que esperaba ser sanada. Ella había oído hablar de Jesús y creyó que podía sanarla. Ella dijo lo que pensaba, que si solamente pudiera tocarle quedaría sana. Actuó sobre lo que pensó y se abalanzó hacia Él. Jesús le respondió inmediatamente: Hija, tu fe te ha hecho salva; ve en paz, y queda sana de tu azote” (Marcos 5:34). La mujer oyó y creyó; habló y actuó en fe. ¡Sigue el ejemplo de esta mujer y un milagro también te espera a ti!

Ulf Ekman


ORACIÓN: Gracias Señor, porque Tu poder sanador está siempre disponible para cada uno que cree y te toca conforme a Tus promesas. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

DEVOCIONAL DÍA 19 DE MARZO



LA AUTORIDAD DE LOS DISCÍPULOS


Entonces llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad sobre los espíritus inmundos, para que los echasen fuera, y para sanar toda enfermedad y toda dolencia”.

Mateo 10:1


Lo que Jesús hizo quería que también lo hicieran sus discípulos. Él predicó, enseñó, sanó a los enfermos, echó fuera a los demonios y entrenó a sus discípulos. Todo esto formaba parte del plan que Él tenía para los discípulos. Eran sus discípulos justamente porque tenían que aprender a realizar estas cosas. Es por esto que les dio autoridad para hacerlo todo en Su nombre. Jesús les dijo: “Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado. 8 Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios…” (Mateo 10:7-8ª) ¿Qué hicieron los discípulos? “Y ellos saliendo, fueron de ciudad en ciudad predicando por todas partes y sanando a los enfermos”. Habían comprendido su cometido: predicar y sanar. No solamente predicar, sino predicar y sanar.

A menudo el Cuerpo de Cristo solo se dedica a una de ellas, pero Jesús nos ordenó hacer la una y la otra. Por esta causa no hemos tomado la autoridad en serio, y la fe se ha convertido en demasiado académica e intelectualizada. Sencillamente hemos degenerado en una sabiduría común o mundana y sus formas de expresión cultural, en vez de creer y practicarlo en el poder del evangelio. Pero el evangelio sin lo sobrenatural, sin el poder de Dios, no es el evangelio que Jesús nos ha enviado a predicar. No tenemos autoridad alguna para cambiar, alterar o diluir el evangelio, sino solo para predicarlo en el poder del Espíritu Santo.

Ulf Ekman


ORACIÓN: Señor, gracias porque Tú nos has dado autoridad para hacer tus obras, predicar y sanar en Tú nombre. Gracias porque Tú autoridad es suficiente para todos tus discípulos y es igual en todos los tiempos y en todas las circunstancias. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

lunes, 19 de marzo de 2012

DEVOCIONAL DÍA 18 DE MARZO



PEDIR EN EL NOMBRE DE JESUS


“Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre; pedid, y recibiréis, para que vuestro gozo sea cumplido”.

Juan 16:24


Cuando Jesús enseñó a orar a sus discípulos les enseñó a usar Su nombre. Acababan de ver lo que el nombre de Jesús podía realizar. Habían visto cómo los espíritus inmundos huían de ese Nombre.

El nombre de Jesús significa salvación. El angel del Señor habló a José en sueños y le dijo: “… llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados” (Mateo 1:21). La salvación vendría por medio de Él. La salvación comprende el nuevo nacimiento espiritual, la renovación del alma, la sanidad del cuerpo y la liberación de toda opresión mala.

Todo lo que Jesús es y tiene para ofrecer está encerrado en Su nombre. Cuando uno invoca Su nombre, le invoca a Él. Cuando a los discípulos se les otorgó el poder para hacer uso de Su nombre, significaba que tenían acceso a todo aquello que Su nombre respalda. De la misma manera que el nombre de una persona rica respalda toda la riqueza que ha depositado en el banco, así el nombre de Jesús respalda todo lo que Dios tiene depositado en el cielo para ti y para mí.

Donde el nombre figure, eso se puede alcanzar. Si crees en el nombre de Jesús el cielo se abre. En Su nombre recibimos respuesta a nuestras oraciones. En el nombre de Jesús ahuyentamos al enemigo. Los discípulos no solamente hablaban con Dios, también ordenaban huir a Satanás. Esa posición y esa autoridad se dan a todos los creyentes. Todos los creyentes tienen derecho a usar el nombre de Jesús. Igual que un policía ordena parar a un camión-tráiler por su autoridad en nombre de la Ley: podemos en el nombre de Jesús parar aquello que en lo natural parece ser mucho mayor que nosotros, por medio de la autoridad completa que tenemos para usar el nombre de Jesús.

Ulf Ekman


ORACIÓN: Señor, gracias porque Tú me has otorgado el derecho de usar el nombre de Jesús. Gracias porque Tu nombre ata y desata, cierra y abre. Por medio de Tu nombre el cielo está abierto y por medio de este Nombre Satanás tiene que huir. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

DEVOCIONAL DÍA 17 DE MARZO



LA AUTORIDAD DE LOS DISCÍPULOS


“He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre todo fuerza del enemigo, y nada os dañará”.


Lucas 10:19


Muchas veces los discípulos vieron a Jesús sanar a los enfermos y echar fuera a los demonios. Jesús quería que los discípulos hicieran lo mismo. Los envió para que hicieran Sus obras en Su nombre. Les dio toda potestad para echar fuera demonios, hollar serpientes y escorpiones y para resistir el poder del enemigo. Y cuando lo hicieran estarían protegidos. Los discípulos no salieron solos. Ninguno de ellos en su propia fuerza podía conseguir lo que Jesús hizo.

Es lo mismo hoy. Por eso Jesús nos da toda potestad para actuar en Su nombre. Su nombre es conocido en el mundo espiritual. En Su nombre todo poder espiritual inmundo, todo enemigo, todo principado se inclina. La fortaleza no residía en la piedad, poder, inteligencia o capacidad de los discípulos sino en el poder y autoridad que hay en el nombre de Jesús. Recibieron permiso para usar Su nombre y sucedieron cosas increíbles. Los discípulos estaban asombrados de que hasta los espíritus inmundos les obedecieran. No esperaban un poder semejante en el nombre.

Un nombre representa a una persona. Por eso los demonios obedecían y desaparecían. Sabían que Jesús era el Hijo de Dios. Su sola presencia les atormentaba e inmediatamente se sometían a los discípulos cuando venían en Su nombre.

Hoy en día es de la misma manera. Por medio de la victoria en el Gólgota, todos los principados y potestades del mundo espiritual han sido derrotados. Satanás ha sido avergonzado y el nombre de Jesús es sobre todo nombre. Hoy el nombre de Jesús está más vigente que nunca y en ese Nombre hay una autoridad enorme.

Ulf Ekman


ORACIÓN: Gracias Señor, porque has dado poder a cada discípulo, a cada creyente en tú Nombre y todos deben doblar sus rodillas en tú Nombre. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

domingo, 18 de marzo de 2012

DEVOCIONAL DÍA 16 DE MARZO



JESÚS ECHA FUERA DEMONIOS


“Y cuando llegó la noche, trajeron a él muchos endemoniados; y con la palabra echó fuera a los demonios, y sanó a todos los enfermos; 17 para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: El mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias”.


Mateo 8:16-17


Cuando las multitudes vinieron a Jesús él las sanó y echó fuera a los demonios. No es la misma cosa. Cuando el poder sanador del Espíritu Santo fluyó a través de Él, muchas enfermedades se sanaron. Sin embargo, Jesús también tomó tiempo para ordenar a los demonios que salieran. Está claro que hay enfermedades y problemas que tienen origen demoníaco, pero no todos. Jesús conocía la diferencia. A menudo se manifestaban los demonios en Su presencia. La gloria de Dios, la presencia del Espíritu Santo en Su vida, desenmascaraban la presencia demoníaca a Su alrededor. Inmediatamente tomaba autoridad sobre los espíritus y los expulsaba. Está escrito que lo hacía con Su palabra. Esto significa que la Palabra de Dios tiene poder liberador en sí misma. Él dijo que Él lo hacía con el dedo de Dios. Quiere decirse que la unción del Espíritu Santo expulsaba los espíritus malos. Él lo hizo ordenándolos que salieran. Jesús tenía autoridad sobre ellos y estaban siempre obligados a obedecer.

¿Fue Jesús alguna vez en su búsqueda? No, pero cuando se presentaron se dirigió a ellos, aunque fueran varios miles, como en el caso del endemoniado gadareno. ¿Sostuvo una conversación larga con ellos? No, Jesús se dirigió a ellos con autoridad, independientemente de que ellos replicaran o no, estaban obligados a desaparecer.

Ulf Ekman


ORACIÓN: Gracias Señor, porque has vencido el mal y ningún espíritu inmundo se resiste a Tu poder. Gracias porque es lo mismo hoy. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

viernes, 16 de marzo de 2012

DEVOCIONAL DÍA 15 DE MARZO



JESÚS ECHA FUERA ESPÍRITUS INMUNDOS


“Pero había en la sinagoga de ellos un hombre con espíritu inmundo, que dio voces, 24diciendo: ¡Ah! ¿Qué tienes con nosotros, Jesús nazareno? ¿Has vendió para destruirnos? Sé quién eres, el Santo de Dios. 25Pero Jesús le reprendió, diciendo: ¡Cállate, y sal de él!”.


Marcos 1:23-25


En el mundo occidental moderno este tema es controversial. Nos consideramos iluminados por la ciencia como para creer en la existencia de espíritus malignos. En su lugar, preferimos aceptar las explicaciones científicas. Cuando apareció el modernismo, y la manera de pensar mundana de la ciencia se hizo de dominio público, se pretendió explicar todo lo sobrenatural del cristianismo etiquetándolo de antiguo y primitivo. Argumentaron que el hombre anteriormente ya había buscado explicaciones mágicas para los fenómenos naturales. Se dijo también que si sobrevivía el cristianismo los conceptos primitivos habría que erradicarlos. Y ciertamente se han deslizado dentro del cristianismo tradicional una buena cantidad de magia y superstición a través de los siglos. Pero la Biblia no trata acerca de la magia y la superstición.

Si los antiguos buscaron explicaciones sobrenaturales para todo, el pensamiento moderno se caracteriza por negarse a aceptar las explicaciones sobrenaturales en absoluto, debido a que ni siquiera se quiere que Dios exista. Pero si Dios existe, también existe lo sobrenatural. Entonces hay una dimensión espiritual tanto buena como mala. No todo lo que es sobrenatural proviene de Dios. Hay también una dimensión del mal, la dimensión de la caída del hombre en pecado. Esa fue la que Jesús tomó sobre sí. Algunos no quieren hablar de esto, les parece desagradable. Pero existe mucho en la vida que es desagradable y a pesar de ello tenemos que abordarlo.

El Cuerpo de Cristo lo ha negado, ha huido de ello, ha evitado y minimizado la realidad del mal y en muchos casos se ha negado a hacer las cosas que Jesús hizo, y muchos que podían haber sido liberados nunca recibieron ayuda. Pero Jesús ayudaba a la gente, por eso echaba fuera a los demonios.

Ulf Ekman


ORACIÓN: Señor, ayúdame para aceptar la realidad del mundo espiritual en lugar de huir de él o negar su existencia. Ayúdame para ayudar a la gente a entrar a la plena libertad. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

jueves, 15 de marzo de 2012

DEVOCIONAL DÍA 14 DE MARZO



EL REINO DE DIOS ES COMO EL GRANO DE MOSTAZA


“Es como el grano de mostaza, que cuando se siembra en tierra, es la más pequeña de todas las semillas que hay en la tierra; 32pero después de sembrado, crece, y se hace la mayor de todas las hortalizas, y echa grandes ramas, de tal manera que las aves del cielo pueden morar bajo su sombra”.


Marcos 4:31-32


El tamaño del grano no es lo determinante, sino el poder de crecimiento que hay en él y el terreno. El grano de mostaza es la más pequeña de todas las semillas pero cuando crece es formidable. Por lo tanto, una sola Palabra de Dios puede dar resultados sorprendentes. Cuando el Espíritu Santo pone una sola palabra en el corazón y da la revelación de su contenido, entonces nuestros ojos ven lo que nunca antes habían visto.

Piensa en la palabra “fe”. Es una palabra pequeña que se puede pronunciar rápidamente, que puede hacer que te sientas recriminado o si se prefiere, no considerarla en absoluto. También puede uno evitarla por otra palabra favorita. Pero Jesús dijo en Lucas 17:6 si tuviereis fe como un grano de mostaza, podríais decir a este sicómoro: Desarráigate, y plántate en el mar; y os obedecería”. ¡Una fe tan pequeña y un resultado tan grande!

A través de los tiempos el Espíritu Santo ha sembrado Sus palabras en el corazón de los creyentes. Sus circunstancias pudieron haber sido como una enorme montaña de una gran cordillera, y la Palabra que recibieron de Dios verse tan pequeña como un grano de mostaza. Pero aquel que deja de mirar las circunstancias difíciles, las derrotas y toda la oposición, permitiendo que el Espíritu Santo le revele lo que está en “el grano de mostaza” podrá ver cómo suceden cosas maravillosas. Un árbol que crece con ramas tan grandes y los pájaros del cielo pueden construir sus nidos a su sombra. Dicho de otra manera, la Palabra que tú recibes en fe y con revelación, también puede ser refrescante y de bendición para miles de personas. La Palabra no es solamente dada para ti. Es como un pequeño arroyo, que poco a poco llega ser un caudaloso río que nadie puede contener.

Ulf Ekman


ORACIÓN: Señor, ayúdame a no perder lo que Tú me dices porque las circunstancias sean adversas. Permite que de lo que Tú plantaste en mi vida crezca algo grande para que muchos sean también bendecidos. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

DEVOCIONAL DÍA 13 DE MARZO


LA TIERRA PRODUCE EL FRUTO


“Decía además: Así es el reino de Dios, como cuando un hombre echa semilla en la tierra; 27y duerme y se levanta, de noche y de día, y la semilla brota y crece sin que él sepa cómo. 28Porque de suyo lleva fruto la tierra, primero hierba, luego espiga, después grano lleno en la espiga; 29y cuando el fruto está maduro, en seguida se mete la hoz, porque la siega ha llegado”.

Marcos 4:26-29


Una vez que la semilla ha sido bien plantada, el siguiente principio entra en funcionamiento. El principio del tiempo. La tierra en sí misma tiene la capacidad innata de producir. El agricultor no necesita ir a mirarla cada día, ni cavar para mirar la semilla y controlar por si algo ha sucedido. Sin la ayuda del agricultor la semilla empieza a crecer. Dios da el crecimiento. Pero el milagro, el desarrollo, el avivamiento no surge de inmediato, sino que lleva su tiempo. Días, semanas, meses, años, pero poco a poco, sin que el agricultor en realidad sepa cómo, aparece el grano en la espiga.

Sobre todas las cosas, el tiempo es un amigo. El tiempo está siempre del lado de la verdad. El tiempo es un factor que trabaja para el reino de Dios. Si la Palabra ha sido bien plantada y permanece, se cuida y se protege no hay nada que pueda estorbar la cosecha. Viene por sí misma. Es solamente cuestión de tiempo. Por eso es de suma importancia no darse nunca por vencido, renunciar o huir, sino perseverar a través de la fe y la paciencia y así recibir lo que nos ha sido prometido. La semilla tiene en sí misma un enorme potencial para dar su fruto. Está diseñada de esa forma. Aún en las circunstancias más inverosímiles se abre paso y crece hasta llegar a ser una espiga de trigo madura. Es sólo una cuestión de tiempo. Del mismo modo acontece con la Palabra de Dios. Es en sí misma un poder explosivo y si solamente existen las condiciones adecuadas el tiempo traerá resultados maravillosos.

Ulf Ekman


ORACIÓN: Señor, ayúdame para no forzar resultado alguno o que me frustre porque no veo fruto en este momento. Ayúdame a comprender que si siembro, también habrá cosecha. Gracias porque el tiempo es mi amigo, no mi enemigo. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

DEVOCIONAL DÍA 12 DE MARZO



LA BUENA TIERRA


“Y éstos son los que fueron sembrados en buena tierra: los que oyen la palabra y la reciben, y dan fruto a treinta, a sesenta y a ciento por uno”.


Marcos 4:20


Aquí está el plan original de Dios. La semilla es la Palabra. Esta se siembra en buena tierra. El terreno es el corazón que recibe la Palabra. La Palabra se recibe y se guarda en un corazón bueno y firme. El principio es que lo que se siembra crecerá. La semilla se entierra y ésta surge hacia arriba. Pero surge de forma abundante. Si el abono es bueno, si el corazón está preparado, no hay límite a la cosecha que pueda producirse. En Proverbios 4:23 se dice:”Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él mana la vida”.

Si guardamos nuestro corazón la cosecha de vida será a treinta, a sesenta y a ciento por uno. La cosecha se hace visible en el medio natural pero viene del corazón, del espíritu. O sea, que, ¡hasta el desierto puede florecer! No depende de las circunstancias naturales. Depende de la calidad de vida interior, del espíritu, del corazón. Dios desea que cada creyente experimente una cosecha en cada surco, en todos los ámbitos de su vida. Tú eres como un labrador que planeas, cultivas, siembras y cosechas en los surcos de tu vida. Esto es de lo que trata tu vida. Esto es en lo que consiste el reino de Dios. La cosecha no cae de repente del cielo. Surge de la tierra. No viene en base a circunstancias naturales perfectas, sino como resultado de las buenas condiciones espirituales. Estas condiciones incluyen: buena semilla, buena tierra, expectativa de cosecha y su tiempo. A esto te ha llamado Dios. Esto es lo que Él tiene para ti.

Ulf Ekman


ORACIÓN: Padre celestial, ayúdame a comprender los principios de la siembra y la cosecha para que pueda cultivar mi corazón y planear para cosechar en cada área de mi vida. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

martes, 13 de marzo de 2012

DEVOCIONAL DÍA 11 DE MARZO



CARDOS Y ESPINAS


“Estos son los que fueron sembrados entre espinos; los que oyen la palabra, 19pero los afanes de este siglo, y el engaño de las riquezas, y las codicias de otras cosas, entran y ahogan la palabra, y se hacen infructuosos”.


Marcos 4:18-19


Aquí se describe otra clase de problema. La dureza ha sido quitada, la persecución ha terminado. Ahora llega un ataque de asfixia. Esto es totalmente distinto, más encubierto, más traicionero. Por los brotes parece que el fruto viene, la semilla empieza a crecer. Pero entonces se pierde el enfoque. Un cúmulo de preocupaciones diarias, actividades, iniciativas y otras cosas comienzan a robarnos el tiempo y la atención. Aquello que en principio era un culto de oración ahora viene a ser una reunión acogedora. Lo que antes era el tiempo de lectura bíblica ahora es tiempo para ver la Televisión. Lo que solía ser el tiempo del devocional familiar es ahora para vídeos alquilados. De repente el “tiempo en familia” se ha convertido en una excusa piadosa para no ir a los cultos y no estar inmerso en la vida y necesidades de los miembros de la congregación. El evangelismo o la oración por los vecinos, eso fue hace años. Tarde, pero certero, las espinas de la mundanalidad y los cardos han crecido y comienzan a ahogar la semilla de la Palabra con la intención de acabar con la cosecha por completo.

¿Qué es lo que se ha introducido? Sencillamente las preocupaciones mundanas. Se ha quitado la mirada en Jesús y nos hemos convertido en “sabios mundanos” muy compatibles y leales al sistema mundanal. La riqueza fraudulenta y el deseo de todo lo demás se ha interiorizado. La enseñanza de la economía bíblica se toma como una excusa piadosa de una enmascarada licencia para la codicia. De pronto el dinero se vuelve extremadamente importante. Ya no somos diezmadores, sino servidores del dinero. Los pensamientos y temas de conversación se mueven continuamente alrededor de la economía, pudiendo pasar meses sin que se oiga brotar del corazón un aleluya o se mencione una cita bíblica dándose la conversación por terminada. Sin que hayamos comprendido que uno ha caído directamente en la trampa del enemigo y ha quedado atrapado en ella, mientras él nos roba la cosecha. La vida se ha destruido.


Ulf Ekman


ORACIÓN: Dios mío, guárdame del auto engaño y de utilizar tus bendiciones para huir de tu Presencia. Ayúdame a no estar tan enredado en mis deseos de las cosas buenas de la vida y que Satanás pueda robarme el fruto. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

lunes, 12 de marzo de 2012

DEVOCIONAL DÍA 10 DE MARZO



PEDREGALES


“Estos son asimismo los que fueron sembrados en pedregales: los que cuando han oído la palabra, al momento la reciben con gozo; 17pero no tienen raíz en sí, sino que son se corta duración, porque cuando viene la tribulación o la persecución por causa de la palabra, luego tropiezan”.


Marcos 4:16-17


El siguiente terreno es diferente. Parece que la tierra es buena. No parece estar endurecida, sino por el contrario es superficial, tiene poca profundidad. Aquí no existe la perseverancia ni nadie que tenga en cuenta el costo. Cuando viene la Palabra se recibe con alegría, pero es de corta duración. Dura lo que dura el culto glorioso que hemos tenido. Después se olvida todo. No se hace seguimiento alguno de la Palabra que se escucha, o sea, con la preparación del terreno. No se retiran las piedras, se dejan ahí. Uno es descuidado con las cosas de su vida que Dios desea quitar. Se quieren resultados rápidos, pero absolutamente ninguna contrariedad.

Son esa clase de personas que a menudo, como los grajos, se amontonan al principio de un nuevo avivamiento. Les gusta la frescura. Hasta les resulta entretenido. Les gusta ver señales y prodigios pero que la Palabra apenas venga a ser como una espada afilada en sus propias vidas. Les gusta tener resultados pero no están dispuestos a sacrificar algo por ello. Son un bocado fácil cuando llega la persecución por causa de la Palabra. Satanás siempre viene para perseguir la Palabra. ¡Él sabe que ella produce resultados! Por eso rápidamente trata de quitarla antes de que se enraíce seriamente.

Cuando la gente abandona a Jesús muchas veces es debido a esto. La cosa se pone al rojo vivo, cuesta demasiado. Esto implica un cambio de estilo de vida, no solamente una aprobación superficial.

Ulf Ekman


ORACIÓN: Espíritu Santo, quita cada piedra que está debajo de la superficie e impiden el crecimiento. Quítame el miedo a las contrariedades y la persecución y muéstrame que con Jesús nunca me sentiré solo, sino fructífero. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!

DEVOCIONAL DÍA 9 DE MARZO



JUNTO AL CAMINO


“Y éstos son los de junto al camino; en quienes se siembra la palabra, pero después que la oyen, en seguida viene Satanás, y quita la palabra que se sembró en sus corazones”.

Marcos 4:15


La semilla es la Palabra de Dios. Esta tiene una calidad celestial. Con que solamente caiga en terreno adecuado tiene garantizado el resultado. Si no hay resultados la culpa no es de la semilla es del terreno. Por lo tanto, nunca debemos culpar a Dios, sino por el contrario investigar el terreno.

El primer terreno que presenta la parábola es una senda a los lados del mismo. Un camino que surge por el trasiego del ir y venir de mucha gente, de manera que ha quedado endurecido e improductivo. Se ha convertido en un camino lleno de grava. Así es el corazón soberbio, altivo y mundano. Oye, pero no escucha. No es receptivo. La Palabra de Dio no penetra. Existe una fuerte indiferencia o desprecio hacia la Palabra lo que impide que ésta logre enraizar. Es fácil para los pájaros recogerla y comérsela. Satanás viene rápidamente y la quita.

Un corazón endurecido por la incredulidad, el orgullo, la crítica o la decepción es una presa fácil para Satanás. Todas las puertas las tiene abiertas y nada le impide entrar y llevarse lo que quiera. Lo trágico es que una persona así puede estar sentada en el banco de la Iglesia y escuchar la mejor de las predicaciones, pero no serle de provecho alguno hasta que la Palabra de Dios, como un martillo, quebrante la dureza de su corazón hasta convertirlo. Anteriormente, solo estaba disponible para la insensibilidad, la auto indulgencia y el desprecio. Esas personas, hasta se atreven a perseguir a los que son abiertos y positivos. En este terreno, no hay fruto alguno.


Ulf Ekman


ORACIÓN: Espíritu Santo, quita toda dureza de mi corazón. Examina los distintos surcos en mi vida para que cada área sea un terreno fácil para Ti. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!