EL BIEN EN TODOS LOS DÍAS DE MI VIDA
“Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores. Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. 6Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida; y en la casa de JHWH moraré por largos días”.
Salmo 23.5-6
Dios es un buen Dios. Él tiene buenos planes y buenos dones para ti. Ningún otro. Dios te desea lo mejor. Él es tu mejor amigo. En el Salmo 23:5 te ofrece una mesa aderezada, y aceite permitiendo que tu vaso rebose. La mesa está lista con todo lo que tú necesitas para vivir y disfrutar tanto de los dones como del Dador.
El aceite refresca el rostro después del caluroso y tórrido desierto. Es el Espíritu Santo que nos conforta y nos da un agradable y suave perfume celestial. La copa llena de vino es gozo en abundancia. Todo esto nos da el Señor en medio de nuestros enemigos. Los enemigos están ahí y no nos deshacemos de ellos, pero para su fastidio tienen que ver como Dios bendice a los que le aman. Los que aman a Dios son bendecidos y confortados por Él, no los que son perfectos.
El futuro descansa en las manos de Dios y no es poco. Pura gracia y bondad te acompañarán todos los días de tu vida. El Señor tiene verdaderamente planificada una vida maravillosa para ti, llena de gracia y bondad para cada día en particular. Él es tu Roca firme. Su deseo es tu protección. En El, con Él y en sus rectos caminos hay todo lo que un hombre pueda desear o imaginar. Y después te espera una eternidad maravillosa donde moraremos en la casa del Señor eternamente.
Ulf Ekman
ORACIÓN: Gracias Padre celestial que has planeado un maravilloso futuro y una vida gloriosa para mí por Tu gracia y bondad. Ahora me acerco en fe para alcanzar todo lo bueno que quieres dar y hacer por mí. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!