DEVOCIONAL DÍA 3 DE DICIEMBRE

UNA OVEJA EN SU REBAÑO

“Como Pastor apacentará su rebaño; en su brazo llevará los corderos, y en su seno los llevará; pastoreará suavemente a las recién paridas”.

Isaías 40:11

Tú y yo no estamos solos. Pertenecemos a un rebaño. Pertenecemos a la Iglesia del Dios viviente. Es un rebaño muy grande, pero el Señor mantiene el orden en ella. Él se encarga de ella de una manera que nosotros jamás podríamos. “Dejad el cuidado de mis hijos para mí, dice el Señor”. Esto significa que hay una capacidad pastoral en el Señor que sobrepasa con creces la nuestra.

Un pastor guía, alimenta, asiste y protege. Todo esto lo hace Él por nosotros. Él lleva al cordero en sus brazos cuando está desfallecido y quiere darse por vencido. El Pastor tiene a la oveja que va a ser madre bajo su supervisión a fin de que no se canse en la caminata y alumbre fuera de tiempo. Él guarda a las ovejas juntas. Él sabe hacia dónde las dirige. Nosotros no sabemos siempre a dónde nos dirigimos, pero Él sí lo sabe. Confía hoy en el Señor. Si parece que se divisa solo la sequía del desierto, confía, aún esperan los pastos verdes. El Señor no nos permite pasar sed ni hambre hasta morir. Él tiene cuidado de nosotros.

Cada oveja madre tiene algo que nacerá. Tú tienes algo que llevas contigo. Algo que el Señor ha puesto en ti. Llevará su tiempo realizarse, y esto nos pondrá impacientes. Nosotros queremos que todo suceda ya. Pero “suavemente, pastorea a las recién paridas”. El calendario de Dios es importante. El llamamiento en tu vida no va a morir como un feto abortado a causa de la impaciencia, la cual te lleva al desánimo y a tirar todo por la borda. Cuando el tiempo se había cumplido, Dios envío a Su Hijo. Lo mismo sucederá con Sus planes para ti y para mí.

Ulf Ekman

ORACIÓN:

Gracias Padre porque eres un pastor grande y maravilloso para mí. Sin Ti andaría perdido y toda mi vida sería malgastada. Gracias por el cuidado de todo en mi vida. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!