DEVOCIONAL DÍA 11 DE OCTUBRE

LA BENDICIÓN TOTAL

“Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo”.

Efesios1:3

Pablo se regocija y alaba a Dios ¿por qué? porque Dios nos ha bendecido. Él está profundamente agradecido por todo lo que el Padre ha puesto a nuestra disposición. ¿Cuánto es esto? “toda bendición espiritual en los lugares celestiales”. Ninguno de nosotros alcanzamos a comprender la enorme grandeza de Dios. Nadie puede alcanzar a comprender la altura ni la profundidad, la longitud o la anchura de la plenitud de la vida eterna. ¿Quién puede medir o calcular el cielo y todo lo que contiene? Y sin embargo, es todo esto lo que Dios ha puesto a nuestra disposición en Cristo Jesús. Se necesitaría toda la eternidad para contar solamente todo lo que Él tiene para nosotros. Y aún así nos dice que lo ha puesto todo a nuestra disposición hoy. No solamente una parte (aún eso sería más que suficiente) pero ¡no! sino: “TODA BENDICIÓN”.

Algunos dicen que se refiere solamente a bendiciones espirituales, no a las materiales. Este pensamiento es agnóstico, no cristiano. La diferencia no la hace Dios. El que las bendiciones sean espirituales significan que vienen de Dios, pero abarca o incluye todos los ámbitos de la vida.

Piensa que Dios no pone ningún límite. Su bondad es siempre superabundante. Su generosidad es enorme. Su amor y cuidado es desbordante. Su creatividad es inagotable. Él lo sabe todo, quiere todo, puede todo, hace mucho más de lo que nosotros podamos llegar a pensar o pedir. Y no dice que Él nos bendecirá, sino que Él ya nos ha bendecido. Puesto que Él ya te ha bendecido quiere que lo aceptes, que lo creas, que tomes de ello y vivas como si fuera una realidad.

Ulf Ekman

ORACIÓN:

Gracias Señor porque me has bendecido de una manera abundante. Gracias por Tu gran bondad hacia mí. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!