DEVOCIONAL DÍA 7 DE OCTUBRE

ABRAHAM FUE BENDECIDO

“Y haré de ti una nación grande, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre y serás bendición.³Bendeciré a los que bendijeren, y a los que te maldijeren maldeciré; y serán benditas en ti todas las familias de la tierra”.

Génesis 12:2-3

Dios vio toda la Humanidad como un mar de pecado y desobediencia. Por el pecado entró la maldición en el mundo. Pero por gracia, Dios tomó a Abram, quien después sería llamado Abraham, y lo bendijo. Con Abraham se inició algo nuevo. Dios escogió un pueblo para que por medio de este pueblo bendecir a todos los demás pueblos de la tierra.

El pensamiento central de Dios siempre permanece y jamás cambia. Él ha determinado bendecir a toda la Humanidad. Él es un Padre que quiere tener una familia. Es un Dios cuyo propósito siempre se cumple. Él es un buen Dios y Su bondad siempre resulta en bendición.

Abraham tomó por la fe las promesas de Dios. A pesar de sus años y sus circunstancias externas creyó en la bondad de Dios. Creyó que Dios realmente quería bendecirle y que verdaderamente deseaba que todo le fuera bien.

Abraham no solamente iba a ser bendecido sino que iba a ser bendición. La bendición, que es la misma vida de Dios, Su misma gloria, nunca queda encerrada en sí misma. Sólo el egoísmo se encierra en sí mismo. El amor comparte. Así la bendición de Dios fluyó a través de Abraham sin límites a todas las familias de la tierra. Dios nunca pone límites a Su bondad ni a Sus bendiciones. Esos límites solamente los ponemos nosotros. Después el Señor fue un paso más allá y dijo que el que bendijere a Abraham sería bendecido y el que maldijere a Abraham sería maldecido. Dios puso un cerco de protección alrededor de Abraham. Esto demuestra que lo que Él hizo es mucho más fuerte y más duradero que lo que cualquier enemigo pudiera hacer.

Ulf Ekman

ORACIÓN:

 Gracias Señor porque tus bendiciones son abundantes, duraderas y sin límites. Tú no las retienes para aquel que te busca. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!