DEVOCIONAL DÍA 17 DE OCTUBRE

EL PADRE QUIERE DARTE LO QUE LE PIDES

“No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé”.

Juan 15:16

Vez tras vez Jesús habla respecto a la oración y su contestación o respuesta. Es realmente así que el propósito de la oración no es la oración en sí misma, sino la respuesta. El mundo está lleno de personas que oran. Se ora en todas las religiones. No es la oración la que tiene el interés, sino el hecho de que Dios responda.

Jesús dice que Dios nos da “todo lo que pidamos al Padre en Su Nombre”. Es el nombre de Jesús el que hace que el Padre responda a las peticiones del hombre.

Sin embargo, hay otros requisitos para que podamos recibir la contestación de Dios a nuestras oraciones. No podemos pedir cualquier cosa, ni de cualquier forma. Debemos conocer Su voluntad y vivir en ella. Jesús dice que Él nos eligió. Que Él ha determinado que le sigamos. Que Él ha determinado que llevemos fruto. Así es que debemos reconocer y obedecer Su llamamiento. Debemos levantarnos y hacer lo que Él nos ha llamado a hacer. Entonces seremos fructíferos.

Sólo cuando somos fructíferos es que la promesa de la respuesta a la oración se cumple. Es cuando podemos pedir lo que queramos y lo recibimos. En la obediencia al llamamiento, en el trabajo de llevar fruto, necesitamos respuesta a la oración en cualquier momento y Jesús dice que entonces podemos pedir lo que queramos. Si tú no crees que recibes respuesta a tus oraciones examina tus actitudes. Examina la disposición de tu corazón y prueba si es recta delante de Dios. Si hay desobediencia en tú vida este versículo carece de efectividad. Las promesas de repuesta a la oración es para aquellos que han respondido al llamado de ir y llevar fruto.

Ulf Ekman

ORACIÓN:

Gracias Señor que me has llamado para que vaya y dé fruto. Ayúdame a obedecerte porque entonces llevaré mucho fruto y recibiré muchas respuestas a mis oraciones. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!