DEVOCIONAL 19 DE JUNIO

BUSCA LAS COSAS DE ARRIBA

“Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba,

donde está Cristo sentado a la diestra de Dios.

2Poned la mira en las

cosas de arriba, no en las de la tierra.

3Porque habéis muerto, y

vuestra vida está escondida con Cristo en Dios” Colosenses 3:1-3.

Pensar en lo que está allá arriba y no en lo que está en la tierra no significa

que uno anda dando vueltas alrededor y anhela el irse al cielo tan pronto

como sea posible. Si no que esto conlleva que nuestros ojos espirituales

estén abiertos de manera que veamos lo que está guardado para nosotros

en Cristo en los cielos. Hemos recibido el Espíritu Santo para que Él nos

muestre lo que tenemos en Dios:”

Y nosotros no hemos recibido el

espíritu del mundo, sino el Espíritu que proviene de Dios, para que

sepamos lo que Dios nos ha concedido” 1ª Corintios 2:12.

Esto quiere

decir que cuando ponemos los ojos en Jesús por la Palabra o la oración, el

Espíritu Santo abre nuestro corazón de forma que comprobemos lo que

tenemos hoy a nuestra disposición en el cielo. El cielo es una dimensión

espiritual. No es solamente un lugar donde vas a residir en el futuro, sino

un lugar de provisión de las bendiciones que Dios tiene para ti hoy. Si tú no

sabes que esas bendiciones existen nunca llegarás a hacer uso de ellas.

Jesús abrió el cielo para que esté abierto sobre ti. Por eso debes ver que el

cielo está abierto. Debes tener los ojos abiertos y tu pensamiento girando

alrededor de lo que hay en el cielo para ti. En el mundo hay escasez, en el

cielo abundancia. En el mundo hay odio, en el cielo hay amor. En el mundo

hay oposición, en el cielo hay favor. Llena tu mente con lo que hay para ti

en el cielo, abre tus ojos espirituales de forma que puedas ver todo lo que

el Señor ha provisto para ti. Es más real que lo que está en la tierra porque

la realidad misma está en Cristo.

Ulf Ekman

ORACIÓN:

Gracias Señor porque Tú me ayudas a levantar la vista a

lo celestial. Allí hay todo lo que yo necesito. Tú quieres que Tú

voluntad sea hecha como en el cielo, así también en la tierra. En el

Nombre de Jesús ¡AMÉN!