SENTADOS CON ÉL EN EL CIELO
“y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los
lugares celestiales con Cristo Jesús” Efesios 2:6.
El Señor quiere mostrarnos qué posición tenemos en Cristo. Nosotros
hemos muerto con Él y hemos sido crucificados para el mundo. Hemos sido
resucitados con Él y sentados con Él en el cielo. Esto es indescriptiblemente
grandioso. No solamente somos pecadores que procuramos creer en Dios,
que está en algún sitio allá lejos en los cielos. No, Él ha venido dentro de
nosotros por medio del Espíritu Santo y nos ha hecho nuevas criaturas, y
hemos entrado con Él en el cielo.
Hoy Jesús está sentado a la diestra del Padre en el cielo. Desde allí reina
hoy en día. Desde allí volverá otra vez como Rey de reyes. Hoy ejerce el
ministerio de intercesión como Sumo sacerdote por nosotros.
Nosotros
somos en Él y con Él.
Él es la cabeza del cuerpo y nosotros los miembros.
Aunque los miembros están realmente en el mundo, espiritualmente
estamos en el cielo ya que la cabeza no puede separase del resto del
cuerpo.
De forma espiritual estamos colocados en una colosal posición de victoria.
Cuando Jesús después de sus públicos padecimientos se sentó a la derecha
de la majestad del Padre en los cielos, Él nos tomó consigo. Le fue dada la
bienvenida de nuevo al hogar y se sentó para regir, y nosotros recibimos
con Él la bienvenida. Él fue coronado de magnificencia y gloria y nosotros
participamos de esa coronación. Él dijo:
”…He aquí yo, y los hijos que
Dios me dio” Hebreos 2:13.
Sus enemigos fueron puestos por estrado de
Sus pies y a la vez, debajo de los nuestros, dado que somos Su cuerpo. Por
gracia Dios no ha elevado a una indecible y alta posición:
en Cristo, no en
nosotros mismos.
Ulf Ekman
ORACIÓN:
Gracias Señor porque me has sentado con Cristo en el
cielo y a su tiempo, mostrarás tu imponente y rica gracia hacia mí
en Cristo. En el Nombre de Jesús ¡AMÉN!
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